Tampoco quiero ponerme trágica; en realidad un paseo matutino con mi padre por la ciudad me ha hecho volver a creer en los Reyes Magos. Por fin he podido ver el Belén de Playmobil y la ciudad estaba llena de niños ya ansiosos, correteando y sin poder parar de hablar de los regalos que iban a recibir. Ay, la inocencia infantil.
Cuando mi hermano y yo todavía conservábamos esa ilusión ingenua sí recibíamos algún regalo la noche de Reyes. ¡Cómo íbamos a quedarnos sin nada! Solían ser cosillas pequeñas que compraba mi madre, y algún regalo que llegaba de Suiza, normalmente con forma de Playmobil -nos encantaban y siempre siempre pedíamos algo "grande" de su catálogo a Papá Noel, pero nos llegaban cosas extra por parte de la familia-. Pero nunca quisimos ir a ver la cabalgata, y una vez dejamos de creer, en Reyes lo único especial era el Roscón.
Pero este año, por comodidad, voy a hacer el roscón mañana para tomarlo en familia el domingo, cuando estaremos todos juntos, justo antes de volverme a Madrid. Así que hoy solo estoy un poco amargada en casa, después de trabajar un poco con un portátil que me está dando sustos, un catarrazo que acaba de arrancar -regalito de fin de fiestas- y una maldita discoteca en la plaza de toros. Porque sí, es súper navideño y muy de Reyes Magos poner una discoteca desde las 16 de la tarde hasta la medianoche, con un sonido infame y música terrible, en pleno centro de una ciudad. Se supone que es "extra" de la Nochevieja, que ya nos echó a los cuatro a dormir al campo, después de las uvas.
¡En fin! Quiero ser positiva -es mi propósito de Año Nuevo, casi el único- y disfrutar de los últimos raticos de Navidad que me quedan en casa. Así que para no ponerme más gruñona he querido venir con las últimas galletas navideñas de esta temporada, mi regalito virtual a sus Majestades de Oriente, y una idea ya para las navidades que vienen. Porque sí, quedan menos de 12 meses para empezar de nuevo con el Adviento, no os quiero agobiar ;).
Es una masa sencilla y simple pero que queda genial para cualquier ocasión. La base es similar a las Spitzbuben, otro clásico suizo, o las más conocidas Linzer, típicas de Austria. En este caso rellenas de ganaché de chocolate casera y solo con forma de estrella, que me parece la forma navideña más universal, simple y bonita, también válida para fuera de temporada. ¿O acaso no hay estrellas todo el año?
Receta de galletas de estrella rellenas de chocolate
Inspiración: un libro alemán de Navidad cuyo nombre no recuerdo
Ingredientes para unas 30 unidades
Ingredientes para unas 30 unidades
- 200 g de harina de repostería
- 85 g de almendra molida
- 70 g de azúcar tipo caster o fino (o usar normal)
- 1/4 cucharadita de canela molida
- 1 pizca de cardamomo molido
- 1 pizca de sal
- 80 g de mantequilla fría sin sal
- 1 huevo L
- ganaché de chocolate para rellenar (yo suelo usar 200 g de chocolate muy negro y 200 g de nata para montar sin lactosa, preparada con suficiente antelación para que esté fría)
- azúcar glasé
Mezclar en un recipiente la harina con la almendra molida, el azúcar, la canela, el cardamomo y la sal, usando varillas para quitar los grumos más gordos.
Picar la mantequilla en cubitos pequeños y añadir a los ingredientes secos junto con el huevo. Trabajar con un procesador de alimentos, con una batidora o con las manos a lo bruto, hasta tener una consistencia de migas.
Continuar ahora amasando para obtener una masa lisa, homogénea y suave. Dividir en dos discos, envolver en plástico film y llevar a la nevera, como mínimo, una hora. Mejor más tiempo.
Precalentar el horno a 180ºC y preparar unas bandejas. Estirar cada porción de masa dejando un grosor de unos 6 mm. Recortar galletas con forma de estrella, procurando emparejar una base completa con una cubierta "agujereada".
Distribuir en las bandejas sin necesidad de dejar demasiada separación y hornear durante unos 8-10 minutos, hasta que se empiecen a dorar. Dejar enfriar en una rejilla completamente, rellenar con la ganaché -sin pasarnos o se desbordará- y decorar con azúcar glasé tamizado al gusto.
Te quedaron 10.Una pinta extraordinaria.Bsssss
ResponderEliminarMi no entender. ¿Has dicho plaza de toros y música pachangera a todo volumen? Joder, igual son mejor los villancicos, que aunque machacones, no arman tanto escándalo... lo mismo han confundido las navidades con la patronal. O con semana santa. O con... da igual, sospecho que los pueblos siempre celebran igual, verdad?
ResponderEliminarvisto por el lado amable, prefiero la música estridente a los toros! ^^U
ResponderEliminarnosotros de pequeños para reyes solo poníamos un zapato en la ventana que nos lo llenaban de golosinas, eso y "la rosca" que me parecía el horror porque llevaba mazapán y pasas y eso, a esa edad, me parecía LO PEOR xD
también te digo que aquí el del haba paga el roscón del año siguiente... allá tiene que organizar el desayuno familiar completo en su casa XD
Ay si pensaba que te había comentado esta entrada! Mi despiste va en aumento.Menudas galletas,maja! Además de preciosas intuyo que deliciosas..las he hecho parecidas rellenas de mermelada pero no de ganache y lo pienso probar mmmm.Estoy enganchada a stranger things! Y esta tarde de domingo además de teeminarme la temporada entera quizá haga galletas...planazo jjj
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