Estoy en Madrid otra vez! Y parece que salí de Murcia justo a tiempo, tengo entendido que el calor que está haciendo estos días por el sureste (y otras zonas del país) es casi infernal. Buena despedida de agosto!
Bueno, esta vez me quedo una semanita pero poco turismo ocioso estoy teniendo, hay otros planes pendientes, cosas que preparar y demasiadas decisiones que tomar. Ay, viendo la publicidad de la vuelta al cole me entra nostalgia de esos finales de vacaciones despreocupados!
Mientras proceso algunas de las recetas que he preparado estos días veraniegos, os dejo con este delicioso cake que se quedó pendiente hace varias semanas. La avellana me gusta muchísimo pero me cuesta más encontrarla en crudo que otros frutos secos, y normalmente la uso en galletas. Su presencia en la miga de un cake o bizcocho es fantástica, dando un toque crujiente de ese sabor tan especial. La presencia del café aporta mucho aroma, pero sin que se note prácticamente su presencia, así que no creo que moleste a los poco cafeteros. Se puede añadir más canela o usar otra especia más para enmascararlo un poco más, aunque no creo que sea necesario (claro que yo soy muy cafetera).
Receta ligeramente adaptada de esta
- 3 huevos
- 130 gr de panela (o azúcar moreno)
- 100 gr de yogur natural
- 70 gr de mantequilla vegetal sin sal (o mantequilla normal)
- 75 ml de café fuerte
- 100 gr de avellanas crudas
- 300 gr de harina
- 1 y 1/2 cucharaditas de levadura
- 1/2 cucharadita de sal
- 1/2 cucharadita de canela
Precalentar el horno a 180ºC y engrasar o forrar un molde desmontable redondo.
Derretir a fuego muy lento la mantequilla y dejar enfriar. Trocear las avellanas un poco, partiéndolas por la mitad con un cuchillo. Preparar el café; yo hice tres espressos en la posición más corta que me deja mi cafetera, dando justo los 75 ml. Dejar enfriar un poco.
Batir a mano los huevos con el azúcar/panela. Añadir el yogur y la mantequilla y batir un poco más. Añadir el café y las avellanas, mezclando hasta que quede todo bien incoporado. Tamizar encima la harina con la levadura, la sal y la canela, mezclando bien pero con suavidad usando una espátula, hasta formar una masa homogénea sin rastros secos. Repartir sobre el molde igualando la superficie y hornear a 175ºC durante unos 25-30 minutos. Esperar unos minutos antes de desmoldar y dejar enfriar totalmente sobre una rejilla.
Pronto más, y espero que con más regularidad!
A hidratarse bien estos días! ;)
Es que los frutos secos crudos están dificiles de encontrar, y carísimos por cierto.
ResponderEliminarBienvenida a Madrid, y a mi también me hace gracia lo de la vuelta al cole, me trae recuerdos de pequeña
Hola eu, qué velocidad!
ResponderEliminarUf sí, qué caros que los venden siempre, me fastidia mucho porque son una de las bases de mi alimentación...
Gracias por la bienvenida! A ver si saco tiempo para curiosear tu blog a fondo que me habré perdido mucho :)
pues tq ha quedado genial. Tiene una pintaza estupenda. Un saludito.
ResponderEliminarQué buena pinta! :P
ResponderEliminarSaludos,
Sun*
Un bizcocho muy bueno. Y la combinación de ingredientes se ve muy rica.
ResponderEliminarSaludos
La combinación del café con la avellana debe ser fantástica, las dos cosas me encantan, así que este bizcocho me lo apunto.
ResponderEliminarAquí en Cartagena no hay quién esté, así que Murcia debe ser un horno...No te des mucha prisa en volver, aunque parece que en Madrid también hace bastante calor.
Un besico.
Bienvenida, y un cake muy rico.
ResponderEliminarMuxus
Café y avellanas en bizcocho. Sensacional. Me encantan las cosas que horneas. Es verdad que la avellana no la veo por ninguna parte cruda. Quizás en fechas próximas a la navidad.
ResponderEliminarMe trae muy buenos recuerdos. Mi abuelo y yo de niño, con 5 ó 6 años partiendo avellanas con un martillo y llenando un cucurucho de papel de periódico pa luego irnos a pasear por la tarde comiendonos las avellanas.
Muchos besos.
Bizcocho con café? que buena pinta tiene y que esponjosidad. Muy rico.
ResponderEliminarBesos!
Ana de: 5 sentidos en la cocina
Como siempre genial¡¡¡ A mi también me encantan el café y las avellanas, quizás me decida y las junte un poco.
ResponderEliminarEn Mallorca encuentro molidas las avellanas tostadas, cierto que crudas siempre es complicado.
Un fuerte abrazo, Teresa
Yo soy de las poco cafeteras... Ni me ayuda a despertarme ni me gusta tomarlo, pero eso sí, el aroma me encanta! Y en pasteles y postres también me gusta, así que con tu permiso me anoto la receta.
ResponderEliminarHola guapa!!!!! disfruta de estos días....el bizcocho me lo apunto porque tiene que estar muy rico.
ResponderEliminarun besazo
Akane, me viene como anillo al dedo, tengo panela que quiero ir sacando y el lunes tengo la lectura en alemán y siempre llevo algo rico para la pausa. Haré tu cake, ya sabes, ahora más que nunca tus recetas me sirven :)
ResponderEliminarUn beso.
Has puesto tantas recetas en nuestra ausencia que no sabemos cuál comentar, jeje.
ResponderEliminarLos langostinos por ejemplo, así a la plancha es como más ricos están y no se nos había ocurrido eso de echar especias, así que la próxima vez lo haremos.
Y después has puesto también varios bizcochos que tienen que estar buenísimos como éste, vamos, que te estás poniendo las botas, eh :P
Sigue disfrutando de tu estancia en Madrid y tranquila que dicen que el calor se va a empezar a ir pronto.
Un beso!
me da error a tu última entrada.. seguro estará rica como el postre :-)
ResponderEliminarPues tienes razón, es difícil encontrarlas crudas, muy difícil diría yo, pero si es la única manera de hacer esta delicia habrá que ponerse a buscar:)
ResponderEliminarBss guapas y me alegro mucho de volverte a ver por aquí.
Un cake fantástico, la combinación de café y avellana me encanta es muy aromática.
ResponderEliminarbicos
Hola Akane de nuevo y bienvenida. Si que te has escapado de una buena, en Álicante 43º a las 16:00 (nos la dicho mi suegro).
ResponderEliminarPues tu cake tiene una pinta deliciosa. Por que nos dices que el café es con esos trocitos de avellana. Y porque el café sera dices que sólo un matiz que si no... (será algo freudiano, pero es que no puedo con el café ;) ).
Fotos preciosas.
Un saludo.
El cake de escandalo y que no entre nostalgia por lo q se avecina... q le vamos hacer... disfruta lo q te quede!
ResponderEliminarUn beso
Una pareja tentadora y preotoñal. Avellanas y café, éxito asegurado en casa.
ResponderEliminarBesitos sin gluten.
Pero bueno Akane cómo has recuperado el ritmo de las vacaciones!! Falto unos días por aquí y veo que has hecho de todo. Me gusta sobre todo este pastel pero es que soy muy golosa y las avellanas me encantan!! Ahora me pido de primero el risotto de calabaza y de postre esto y más ancha saldría de tu casa... En fin, espectacular!!!!
ResponderEliminarbesitos guapa
Me encanta ponerle avellanas y/o nueces a los bizcochos y, en mi caso, de cosecha propia...jejeje...yo no tengo huerto pero si tengo árboles frutales: manzanos y ciruelos, así como avellanos (ablanares) y nogales (nozales). De hecho, las avellanas ya las han recolectado mis padres hace unas semanas, así que aprovecharé para hacer este rico bizcocho ;)
ResponderEliminarUn besote, mi solete.
Vamosalculete.