Mi madre se reiría de mí si supiera el trajín que tengo con unos bichitos en Madrid. Son como pequeños mosquitos que viven en algunas de las macetas de nuestras plantas, que de vez en cuando se dedican a revolotear y me ponen de los nervios. Soy una maniática y hay muchas tonterías que me sacan de quicio, y esta es una de ellas. Ignoro qué motivo lleva a estos insectos a elegir unas macetas y no otras, porque la tierra que comparten es la misma, pero descubrí hace unas semanas que les encanta la albahaca fresca. Así que de vez en cuando le pego meneos a la pobre planta para hacer salir a esos bichillos y mandarlos a tomar vientos a otro lado.
No tenemos muchas pero ni el elfo ni yo podríamos vivir sin plantas, aunque las pobres sobreviven como pueden. Ahora él está inmerso en el aprendizaje del cuidado de bonsáis, mientras las demás siguen aguantando ahora el verano. El caso es que desde hace un tiempo tenemos una alhabaca entre ellas, que yo no pensaba que iba a durarnos mucho porque el interior no les va mucho y además no recibe todo el sol que necesitaría. Además, la compré de pura casualidad. Necesitaba unas hojas de albahaca fresca para una receta, me resigné a comprar de esas envasadas pero descubrí que vendían más baratas las mini plantitas. La etiqueta decía que podría aguantar un par de semanas en la cocina, y ya lleva dos meses cumplidos. Yo encantada claro, a nadie le sorprenderá conociendo el nombre de este mi blog :P.
Albahaca y tomate hacen una pareja de excepción y pueden dar vidilla a cualquier receta, sobre todo si sumamos algún queso a la ecuación. Por eso no me compliqué mucho cuando el elfo y yo teníamos antojazo de pizza una noche de viernes para cenar pero ya era demasiado tarde para ponerse a hacer una masa decente. Pero tenía hojaldre en la nevera, tomate frito estilo casero en la despensa, queso de cabra abierto, la albahaca ya pedía una poda... Me acordé del delicioso pastel salado que solía hacer mi madre con hojaldre en mi tierna infancia y en 20 minutos ya teníamos una deliciosa cena apañada.
Tener una buena despensa provista de productos de calidad listos para usar en cualquier momento me da mucha tranquilidad mental, y el tomate frito estilo casero Orlando es de mis favoritos desde que visité sus plantaciones y la fábrica donde lo elaboran. Además son muy majetes y me han dado 11 kilos de su tomate para regalar a uno de mis lectores, más que suficiente para llenar un año de muchas recetas con tomate! ¿Tenéis hueco en la despensa? Si os apetece participar en el sorteo, solo téneis que dejar un comentario en esta entrada contándome vuestra receta favorita con tomate frito, mucho mejor si lleva asociado algún recuerdo familiar, que sabéis que me encantan. Tenéis una semana de plazo, ¡mucha suerte!
Receta de tarta salada de tomate, queso de cabra, aceitunas y albahaca
Inspiración: el recuerdo del pastel de hojaldre de mi madre y las ganas instantáneas de pizza
Ingredientes para 1 tarta medianamente grande
- 1 masa de hojaldre refrigerada
- 1 bote de tomate frito estilo casero Orlando
- tomillo, romero y orégano
- 1 rulo de queso de cabra
- 1 puñado de aceitunas sin hueso
- pimienta negra recién molida
- albahaca fresca
- aceite de oliva virgen extra
Sacar la masa de hojaldre de la nevera para que se atempere un poco. En verano quizá no haga falta esperar mucho. Precalentar el horno a 200ºC y preparar una bandeja cubriéndola conpapel sulfurizado.
Estirar el hojaldre hasta dejarlo bien finito y homogéneo. Cubrir con el tomate frito distribuyéndolo bien, dejando un pequeño hueco en los bordes. Doblar la masa sobre sí misma para sellar y marcar el perímetro con el borde más grueso.
Añadir tomillo, romero y orégano por encima al gusto antes de distribuir el queso de cabra cortado en medallones. Laminar las aceitunas y repartirlas por la masa. Agregar un golpe de pimienta negra y regar con un hilo de aceite de oliva.
Hornear bajando la temperatura a 180ºC pasados 5 minutos, hasta que la masa esté bien dorada y el queso medio fundido, unos 20 minutos. Agregar la albahaca fresca cortada o picada por encima al salir del horno, y un poco más de aceite de oliva si se desea.
Animáos a participar en el sorteo, que además me encantaría saber cuáles son vuestras recetas favoritas para emplear el sofrito de tomate. ¿Le dáis algún toque especial? ¿Sois muy de tomate en casa? Yo tengo la suerte de tener aquí la despensa a tope de tomates pera recién cogidos, y muchos tarros de conserva listos para usar todo el año :).
Uy, pues nada, que yo comento aunque no sé si enviarás el tomate frito a Canarias, jiji, da igual :D El caso es que yo nunca vi a mi madre hacer tomate frito casero. Como siempre cocinaba a contrarreloj, en olla express y apurando, pues no se tomaba casi nunca el tiempo necesario para elaborar el tomate y tiraba siempre de los de bote. Hace 30 años no existían las recetas comerciales que hay ahora, con sofritos y más naturales, así que yo recuerdo que nuestra pasta casi siempre se acompañaba con tomate frito Solís, que sería la marca puntera del momento.
ResponderEliminarYa de mayor e independiente trabajé un poco en mi propia receta de tomate frito. Ahora me dedico a hacer y congelar siempre que puedo. Sobre base de aceite de oliva pico cebolla y ajo, y luego añado pimiento rojo y verde y zanahoria. Añado una lata de tomate triturado o troceado, salpimento, orégano y albahaca (seca, porque casi nunca tengo fresca en casa y mi planta duró dos telediarios, jaja) y un ratito todo al fuego. Luego le doy un toque de batidora y coge un color naranja precioso :D Congelo en tuppers individuales, como para un plato, y otros más grandes para pizza o para compartir. Pero en caso de no tener esta salsa casera, está claro que cualquier bote preparado te saca de un apuro!
Disfruta del veranito murciano ;)
saluditos
Qué apañada eres!! A mí ese colorcito naranja también me gusta, aunque las marcas y los cocineros prefieren evitarlo. Creo que es por la oxigenación del tomate al batirlo, pero a mí me gusta :)
EliminarTu tomate frito casero es muy similar al mío!
Arroz con tomate frito y huevo, sin duda es mi receta favorita. Además, de pequeña no me gustaba el tomate frito casero así que siempre que lo tomaba era con tomate comprado; y si a eso le añades que tu abuela hiciera el mejor arroz de base, tenías un plato 10.
ResponderEliminarAhora ya me gustan las salsa caseras, pero las conservas vegetales te sacan de más de un apuro en la cocina y no sé si tengo espacio en la despensa para 11 kilos de tomate, pero sí que tengo recetario y espacio en la barriga para usarlos :P ;).
Jajaja, lo del recetario y espacio en la barriga me ha encantado! XD
EliminarLa combinación de arroz con tomate y huevo es tan sencilla pero tan rica! Es de esas comidas que te las preparan un día que estás algo de bajón, o con un hambre de lobo, y te sienta mejor que el plato más caro del mundo.
Qué tarta salada tan rica!!! Y la verdad es que es perfecta para el verano!
ResponderEliminarAii, mi receta favorita con tomate frito siempre ha sido la lasaña. Todavía hoy me entra el hambre sólo de pensar en ese olor a pasta, bechamel y tomate frito en el horno!
Mi madre siempre ha cuidado mucho nuestra alimentación, así que la lasaña no era un plato muy frecuente en casa (aunque hoy en día me he dado cuenta de que la lasaña puede ser súper sana! todo depende de los ingredientes!)
Aún así, ella sabía que me encantaba, así que en días "especiales" siempre tocaba lasaña!!
Creo que lo que más me gustaba era que mi hermano y yo siempre participábamos en la elaboración: era toda una fiesta! Además, mi madre nos ponía a cada uno su mini-plato para que cada uno hiciese la suya!! La mía siempre llena de bechamel y tomate!!
Hoy en día me sigue encantando la lasaña, seguramente por todos esos buenos recuerdos!! y, siguiendo la tradición, sólo la hago en días especiales!! jaja Y tampoco ha cambiado la receta: sigo haciéndola de atún como cuando era peque!
Un besote y a disfrutar del verano! :)
Mi madre también borda la lasaña (bueno, con su toque personal, un italiano igual se enfadaría, no sé, jajaja) y la preparaba también de vez en cuando, algún día de fiesta, o en un cumple... Me encanta esa imagen de los hermanos ayudando en la cocina, a veces llenarlo todo de manchas es lo mejor si se pasa un buen rato :).
EliminarEn casa, siempre hemos hecho el sofrito casero. Aún recuerdo el plato estrella, las papas con tomate. Unas ricas patatas fritas, regadas con una buena salsa de tomate casera por supuesto. Nos apuntamos al sorteo. Un abrazo
ResponderEliminarAy, las buenas pataticas con tomate del bueno... qué bien combinan ambos! Cuando hay producto de calidad no hace falta mucho más :)
EliminarHolaaaaaaaa :) me ha encantado tu tarta salada con hojaldre y ese tomate tan rico.Qué guay lo del sorteo! En mi casa ya desde niña hacíamos el tomate casero, con mucha cebolla y con mucha paciencia y cariño de mi madre.Mi perra se bebió una vez un bote entero y estuvo maldita y panza arriba varias horas.La pobre.. Me apuntoo
ResponderEliminarLa paciencia y el cariño de una madre en recetas así es el ingrediente fundamental :). A mi madre y a mí nos gusta mucho con cebolla, pero mi padre la odia así que tenemos que tener cuidado de que no se note mucho, jajajaja. Ay pobre perrita! Mi gato en eso es más escrupuloso, es raro que se coma algo que no le vaya a sentar bien (es un sibarita).
EliminarOh! Qué buena tarta! Me la apunto para cuando no tenga base de coca mallorquina y así la sustituyó, siempre viene bien estar prevenida.
ResponderEliminarMi recuerdo familiar con el tomate frito solo le lleva al arroz a la cubana, de pequeña no era muy comilona, pero cuando mi madre iba apurada y quería que yo comiera recurría a ese plato, con tomate frito comercial, ella no siempre tenía tiempo de hacerlo casero y sabía que yo comería seguro, aún hoy recurro a ese plato si no tengo mucho tiempo para cocinar y funciona, siempre funciona.
Un beso guapa
Por cierto! A mi tampoco me van los bichitos, grrrrr!!!!
Otra fan de arroz a la cubana, qué bien! Es el plato de batalla de mi padre cuando llega hambriento, y si el arroz sale bien es que sienta de maravilla. A veces le gusta añadir plátano frito también :).
EliminarTener tomate frito comercial en la despensa siempre viene bien para apuros, claro que sí :).
Aunque hayas tenido calor seguro es fantástico pasar unos día al campo con la família, relax, paz...los gatos con los gatos akupas jaja me ha encantado yo alguna vez también he tenido algún gato akupa que al final se han vuelto de casa jaja, aisss por otro lado pobre albahaca tuya jaja que sufre la consecuencia de esos bichitos ( yo también la menearía quita bichooo)jajaja la tarta salada debo probarla, me parece que tiene que ser deliciosa,respecto al concurso participo sin duda mi recuerdo es unos macarrones que incluso tengo en mi blog una receta que mi abuela pasó a mi madre y ella a mí y para mí no hay macarrones mas ricos jaja que voy a decir y llevan un sofrito de cebollla, longaniza, champiñones ,buen bote de tomate frito si es estilo casero mucho mejor, entre otras cosas,besos
ResponderEliminarMadre mía qué bien suenan esos macarrones, voy a buscarlos por tu blog! A mi novio le van a encantar, los prepararé cuando acabe el verano y apetezca otra vez platos así de contundentes y reconfortantes :).
EliminarAl final estoy pasando menos calor aquí que en Madrid!
Lasaña,lasaña,lasaña!!!
ResponderEliminarAunque se me ha hecho raro escribirlo, porque durante mi infancia era lasagna (abuela italiana) y ahora que el Sr. Torres ha aprendido a hacerla es lasanya, en catalán! Qué cosas.
En mi casa había un horno enorme y varias fuentes lasagneras, así que más de una vez hicimos reuniones lasañiles con los amigos de la universidad que ríete tú de ese capítulo de Friends en que Mónica hace como 20 fuentes xD
Las tres formas me gustan, me parece que cada idioma tiene su encanto, y más en la cocina :).
EliminarOtra con recuerdos de lasañas caseras, me encanta :D Pero eso de las reuniones lasañiles madre mía, qué grandísima idea! Ya que te pones a hacer lasaña, que sea a lo grande y en buena compañía :D
Qué buena! Me encantan todos los ingredientes! Una tarta salada para sorprender en casa! Ideal para estos días de fiesta! tomo buena nota y un trocito si aún queda algo! Besos
ResponderEliminarMil gracias, me alegro de que te haya gustado! :)
Eliminar¡Que casi no llego al sorteo! A mi un buen tomate frito me encanta. Y yo creo que el plato estrella con él es el pisto, que tantos años llevo haciéndolo en casa. Con un huevo frito campero está de vicio. Es una pasada, a veces también con un poco de arroz integral.
ResponderEliminarAy, que bien me vendrían unas provisiones para mi alacena. ¡Crucemos los dedos! ¡Un abrazo!
Llegas a tiempo, más vale tarde que nunca! :)
EliminarUy el pisto, qué rico, es verdad que solo necesita algo simple como arroz o un huevo, y buen pan, para tener un platazo que además es genial para verano. Suerte!
Hola, guapa! Mi receta favorita para usar el sofrito de tomate es el pisto de Calabacín y pimiento. Mi padre lo hace con ub arte que... oh, Dios mío, está delicioso!
ResponderEliminarGracias!
Y otra que se decanta por el pisto, qué bien! Es que a mí también me chifla, y yo desde que vivo lejos de mis padres lo hago siempre además con calabaza :).
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